Por mucho que nos guste, no podemos aprender un idioma tomándonos una pastilla o poniéndonos una máquina milagrosa en la cabeza durante unas semanas. Si realmente fuera posible aprender de esta manera, probablemente todas las escuelas y universidades lo estarían haciendo.

Es cierto que aprender un idioma lleva tiempo. Pero lo que realmente importa es cuánto tiempo y cómo te sientes mientras lo haces. Si eliges un mal profesor o una mala escuela, una cosa es segura: estarás tirando un montón de tiempo y dinero por la ventana.

Para evitarlo, hemos reunido los puntos de academia de inglés Helen Doron Toledo que consideramos más importantes para que puedas elegir una buena escuela de idiomas.

Debe ser una escuela de idiomas certificada y recomendada

Una buena escuela de idiomas no tiene miedo a un examen. La Asociación Profesional de Escuelas de Idiomas del Sello Europeo es una organización independiente que inspecciona las escuelas de idiomas húngaras; visitan las clases e inspeccionan a los profesores y las oficinas.

Su profesor debe ser un verdadero maestro

Los profesores de idiomas comprometidos, con talento y con vocación, además de hablar bien el idioma y ser capaces de compartir eficazmente sus conocimientos, hacen que los cursos de idiomas sean excelentes. Hablar un idioma por sí mismo no hace que una persona sea capaz de enseñarlo. Los padres o los propios estudiantes de idiomas no pueden evaluar de antemano las capacidades y los conocimientos de un profesor.

Debería preguntar a la escuela cómo lo hacen. La respuesta ideal es que, tras realizar una entrevista profesional y una evaluación de los conocimientos lingüísticos del profesor, el candidato observa una clase y luego es observado durante una clase de prueba. El candidato sólo es admitido como profesor si todo esto ha sido excelente. El director de estudios debe observar periódicamente las clases del nuevo profesor y proporcionarle información continua.

Debe haber profesores nativos

No se puede tener una buena escuela de idiomas sin hablantes nativos. Con su ayuda se aprende mejor la pronunciación, las expresiones y la cultura. Por lo general, hay menos gramática en sus clases, pero más conversación y diversión. Aprender de un verdadero hablante nativo es una aventura.

Debe haber un director de estudios

El director de estudios es un profesor experimentado y altamente cualificado que supervisa el trabajo de los demás profesores. Observa las clases, revisa los últimos materiales de aprendizaje y es responsable de garantizar la profesionalidad. Una buena escuela de idiomas tendrá sin duda un director de estudios bien cualificado. En Coventry House hay dos directores de estudios: uno para los cursos de inglés y otro para los de alemán y otros idiomas.

Debe ser una escuela de idiomas y un centro de exámenes

Si quieres hacer un examen de idiomas, vale la pena elegir una escuela que también funcione como centro de exámenes. Es importante porque estas escuelas tienen profesores que también son examinadores. Pueden aportar conocimientos importantes y pequeños trucos verificados y actualizados. Estas escuelas tienen regularmente cursos de preparación para estos exámenes, que ayudan considerablemente a la obtención de su certificado de idiomas.

Tamaño de los grupos

Pregunte por el tamaño de los grupos. Aunque el límite máximo legal de estudiantes es de 16, creemos que el número ideal es de 4 a 8. La gente suele preguntar si es más eficaz aprender de forma individual o en grupo. Las clases individuales son mejores para quienes tienen dificultades para conciliar sus necesidades y su disponibilidad con los demás.

Esto puede significar un horario inusual o la necesidad de alcanzar su objetivo en un plazo muy estricto. Sin embargo, según nuestra experiencia, la motivación se mantiene más fácilmente en grupo y la práctica de ciertas formas de comunicación requiere más de dos personas (el profesor y el alumno).